ESTA NOCHE

Me habría gustado estar contigo

conversando de mil y una cosas

como entonces.

Ver tu rostro cambiar de gestos

y escuchar el fragor de tu batalla interior

cuando me acerco.

Me habría gustado verte de lejos

sin que me vieras verte

para llevarme en las pupilas tu naturaleza auténtica y extraña.

Habría querido ser arrebatada por tu viento

arrancada de tajo de mi quieto espacio

para volar con vos

como gaviotas

como cuervos

como dragones lanzallamas de otoño.

Todo habría querido en esta noche.

Pero sólo hay silencio

y una blancura aburrida y sin reflejos.

EL TERCER OJO

Hay otros ojos.
Están entre los tuyos y míos
mirando tus pupilas a través de las mías.

Resuena en tus oídos
el timbre de una voz que no conozco
usando mis palabras.

Vas inventando
tejiendo una red de araña que amenaza tu equilibrio
porque eso es la mentira
que al final te atrapará en olvidos.

Por más que mi piel se te insinúe, lejana
por más que mi aliento quiera entibiar tu frío
no hay manera de evitar la llegada del tedio
la ausencia y el hastío.

Y percibo otro latido en tus latidos
un tercer ojo que vigila tus idas y venidas
otra dimensión amenazando nuestras vidas
hasta hoy separadas pero unidas.

Llegará la luz que termine con la noche,
con la penumbra de entrañas y suspiros,
con tu presencia como el humo entre los dedos.

AUSENCIA

El eco de tu voz ha resonado en mis oídos todas las noches
y mis ojos se llenan de figuras de recuerdo
te extraño como ni la ausencia sabía que lo haría
y el vacío en mi alma es tan inmenso
como el de mi vientre...

SOY

La voz que te aconseja
la oyente atenta que te escucha
seco lágrimas
le hago frente a tus rabietas
a los silencios inexpugnables
a tus iras

Cierro los ojos imaginándote
ojos arrasados
boca en mueca repulsiva
el pecho abierto
a viva piel del alma
gritando dolores de otros siglos

aferrándote
necio y morboso
a una muerte pasada hace mil vidas
pero que te hace purgar los pecados de esta mañana
cuando te sientes solo
y culpable
abandonado en tu herida

entonces reclamas
gritas al viento el error supuesto
y no te das cuenta que todo en esta vida
es causa y efecto
hasta en la muerte dolorida

no soy piel
no soy boca
ni sexo
ni ojos en tu cama amanecida

sólo soy el alma que te acoge
que cuida tu razón y tu locura
desde una madrugada fría

no soy más
y no soy menos

sola yo con tu agonía.

LIBREMENTE

Por más que busco entre mis ojos
entre la oscura capa de mis párpados
en la rojiza penumbra del sueño
arranco malas hierbas
araño y escarbo entre el recuerdo

No encuentro una brizna de deuda
ni de compromisos adquiridos

Vos y yo somos lo que somos
porque tu palabra enlazó a la mía
una madrugada enloquecida
porque solos estuvimos por siglos de vigilia hasta encontrarnos
en la búsqueda perpetua
del mismo pulso en nuestras venas

Y la misma palabra que me diste
que yo abroché a mi alma enardecida,
esa misma palabra te devuelvo
si en ello consigo mantener tu vida

Si el aleteo de mis dedos en tu frente nunca llega
si el aroma de tu piel amanecida nunca aspiro
si el sabor de tu boca amarga en la alborada nunca pruebo
todo entrego, si con ello engancho tu alegría

Nada me debes
y nada debo
todo lo que somos y queremos
es tan libre como el aire que respiro
aunque tengas mi lecho intocado prometido
o la seda de mis muslos esperando tus apremios
nada será obligado
sólo la brisa de tus gemidos en mi oído

La mejor palabra

La mejor palabra, dicen, es la que no se dice.
No la diré, entonces.
Sólo quiero hacerme presente
y contar contigo los amargos segundos
en contrapartida a los dulces recuerdos
-los que seguramente atesoras callada-
guardados en las manos de tu alma
y en los sonidos ahogados de tus risas.

Si cada cual supiera cuándo se marcha
tal vez la vida no tendría gracia ni consuelo
tal vez todo sería tedio
desesperanza
sin remedio.

Pero cada vida es rica en sorpresas
en tiempo compartido sin temores
en entusiasmos, sonrisas y llantos
que nos unen en el torrente de sangre
o en la amistad recién adquirida.

¿Qué más se puede ofrendar al ser amado
sino momentos plenos, auténticos y nuestros?
El ojo en el ojo
y el alma enredada entre los dedos
desde la aurora de la vida
hasta la noche que abre otra puerta hacia otro día.

Qué más, ¡sino amor sin despedidas!

CHACHAL

dame tu aliento
amor
dame tu grito
dame la entraña de tu alma en rebeldía
dame tus odios
tus triunfos y fracasos
que con ellos me haré un chachal de fiesta
para usar la noche que te llegues a mi catre
hasta la orilla de mis muslos
hasta la orilla de mis sueños
de mis ganas
y deseos
la noche que vestiré mi mejor piel
de mi blanca piel descolorida
que azotaré de gusto por tu aroma
para tornarla rosa
brillante y lujuriosa
con nada más en el cuerpo
que los hilos rojos del collar de nuestros sueños

JAZMINES

Muero por verte en esas cosas simples
en lo diario e intrascendente
sin que vos me veas
sin que adivines mi presencia
seguirte con la mirada
con el alma en la punta de los dedos
y sentirme parte de tu vida.

No lejana
ni ajena
ni espectadora
que los jazmines sean para mí,
aunque no lo sepas,
y tocarlos y aspirarlos cercanos
después de que tus dedos los acaricien.